La Mágica Libélula
Hoy quiero compartirles el significado de elegir la libélula como símbolo de los Atmacuentos. Podría contarles el significado que muchas culturas le han dado, como la pureza, la victoria, el cambio, o la madurez entre otros, pero me quiero enfocar en lo que han significado para mí.
Seguro que como a muchas otras personas las libélulas me han fascinado desde muy joven, no sólo por sus colores sino por la gracias para volar, por su transparentes e iridiscentes alas y su sensibilidad a cualquier movimiento que sientan cerca. Alguna vez siendo muy joven alguien me dijo que eran símbolo de cambio y desde entonces no me extraña que mis guías las hayan hecho cómplices para enviarme mensajes cuando me querían comunicar que debía cambiar algo o que se avecinaban transformaciones profundas. Si eran rojas, azules o amarillas cobraban especial significado en el área que asociaba a dicho color. Siempre ha sido para mí una forma mágica que ha tenido la vida de decirme…»algo bueno va a pasar».
Cuando quise buscar un símbolo para los Atmacuentos supe que la libélula era la indicada. Tienen un largo proceso en el agua (emociones) que les permite ir formando un cuerpo más maduro para pasar a una dimensión más ligera (el aire/consciencia). A diferencia de las mariposas que tienen un período de introspección en su crisálida, las libélulas son más activas durante su metamorfosis, en su período acuático como ninfas y es por ello que me identifico más con ellas.
Su vuelo es bello y su fascinación por la luz que se refleja en el agua es importante, así como los rayos de consciencia que se dejan ver más allá de las emociones. Es el animal que más distancias recorre en el mundo, más que las ballenas o las aves, para realizar su travesía migratoria siempre buscando el agua dulce para continuar su ciclo y es que desde que nacen siguen la travesía que les viene marcada generacionalmente. Pareciera que las libélulas trabajan en equipo con sus antepasados y su descendencia para llegar al final de la travesía.
Son consideradas en algunas culturas como conectoras de este mundo y el más allá, por eso nuestra libélula es lila y rosa, del color de la espiritualidad y el amor y lleva en sus alas las palabras que vienen del cielo en forma de cuentos para llevarlas al corazón de quienes las precisen.
Estoy segura de que mis guías saben que esta vez soy yo quien les hace un guiño a través de la libélula de los Atmacuentos.